Rusia anuncia una reducción de producción de petróleo para castigar a Occidente

Alexander Novak, viceprimer ministro de Rusia, ha anunciado que, tras los límites impuestos por Occidente al petróleo ruso, se reducirá la producción a 500.000 barriles por día.

«A partir de hoy, estamos vendiendo completamente todo el volumen de petróleo producido, sin embargo, como indiqué anteriormente, no venderemos petróleo a quienes se adhieran directa o indirectamente a los principios del ‘precio tope'», ha asegurado Novak en el comunicado.

 

Rusia produce alrededor del 10% de todo el petróleo crudo del mundo. Como consecuencia a la reducción de producción, el precio del crudo Brent sube más de un 2%, lo que equivale a unos 86 dólares por barril.

El castigo de Occidente a Rusia

El G7, la Unión Europea y Australia acordaron prohibir el transporte por mar del petróleo ruso siempre que el precio fuese superior a 60 dólares por barril, como parte de las sanciones occidentales contra Moscú por el conflicto en Ucrania.

La OPEP ha comunicado que no tomará ninguna decisión ni se retractará tras el anuncio de Rusia. «Rusia cree que el mecanismo de ‘precio tope’ en la venta de petróleo y productos petrolíferos rusos es una interferencia en las relaciones de mercado y una continuación de la política energética destructiva de los países del Occidente colectivo», ha asegurado Novak.

 

El desafío de Rusia

Rusia se enfrenta a numerosos desafíos, impuestos por Occidente, para frenar su producción de petróleo, una fuente de ingresos clave para el presupuesto de la nación.

A esto hay que sumarle que Rusia gasta cada vez más dinero para financiar la guerra en Ucrania, mientras que los ingresos van disminuyendo. El recorte de la producción de petróleo solo serviría para agravar este problema financiero.

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