La caída del petróleo tras los recortes de la OPEP es sólo un anticipo de lo que sucederá en 2024

El mercado del petróleo se encuentra en un estado de incertidumbre desde que la OPEP+ anunció nuevos recortes en la producción. A pesar de estas medidas, los precios del crudo han registrado considerables descensos (alrededor de 80 dólares por barril), generando sorpresa y desconcierto.

Los recortes anunciados por la OPEP+, sin embargo, parecen insuficientes para contrarrestar el aumento de la oferta externa al grupo. Además, existe también cierta inquietud sobre si estos recortes representan el último recurso de la OPEP+ para regularizar la situación petrolera. Algunos expertos, como Ann-Louise Hittle, de Wood Mackenzie, señalan que “la situación económica global y las dudas sobre el crecimiento de la demanda están impulsando estas medidas, aunque persisten las incertidumbres sobre si los países cumplirán con los recortes acordados”.

A pesar de estos esfuerzos por reducir la producción, los precios se mantienen estables, en torno a los 80 dólares por barril, a pesar de que la demanda ha alcanzado ya sus niveles más altos. Se prevé, para el primer trimestre de 2024, que el crecimiento de la oferta global superará la demanda, aumentando los inventarios.

¿Qué debemos esperar del 2024?

Los análisis muestran un mercado equilibrado para el próximo año, con un crecimiento proyectado en la demanda que será casi igualado por el aumento de la oferta. Sin embargo, este escenario contrasta con el del año anterior, donde el crecimiento de la demanda superó con creces el de la oferta.

La situación se ve complicada por las preocupaciones sobre la desaceleración económica global, especialmente en regiones de la Eurozona. Los precios del petróleo se ven afectados por las perspectivas de un crecimiento lento en países como China y Estados Unidos, reflejando desafíos en el sector inmobiliario y tasas de interés persistentemente altas.

En resumen, el mercado del petróleo enfrenta un panorama desafiante en 2024, con la OPEP+ implementando recortes de producción en un intento por equilibrar la oferta y la demanda, mientras se enfrenta a la incertidumbre sobre la evolución económica global y la demanda futura de petróleo.

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